2007/05/29

Por qué no he fumado porros ni tomado otras drogas ilegales

Hace poco he tenido yo una charla en la que, a mis casi treinta años, me he visto justificando por qué no he probado nunca drogas ilegales. Nótese, en primer lugar, el concepto de ilegales, que de hecho engloba todas las drogas que no he tomado... ¡qué casualidad! De hecho, la ilegalidad misma sería para mi un motivo perfectamente respetable y, por supuesto, razonable; no así para otras personas, pues es algo que me han echado en cara no sólo esta vez, sino varias en el pasado.

No es la única causa, pero es sobre la que, muchas veces, la gente me ha dicho: "qué tontería", "no tiene sentido", "qué contradicción", "no puedo entenderlo" y un sinfín de cosas parecidas. Ahora que tengo este blog, tras varias charlas similares y esta última donde, una vez más, volvieron a recordarme que mis razones eran poco menos que ridículas, espero poder explicarme de una vez al respecto y, fijaos bien queridos lectores, ni siquiera tratar de demostrar nada, sino sencillamente que se me respete, joder, ¡que manda huevos!

Antes un poco de historia y de mis otros motivos, que los hay, ya lo creo, aunque otros se empecinen en el tema de la ley, que tal vez consideran más maleable... ¿para justificarse? Pregunto... Voy: mis padres siempre me educaron en el peligro que constituian las drogas, como supongo a muchos jóvenes, con el valor añadido de que ellos jamás probaron una droga prohibida. Está muy bien eso de "yo he probado tal y no es bueno", pero de alguna forma me inspira más credibilidad y respeto el "eso no es bueno y por eso nunca lo he probado", sobre todo cuando te piden que a su vez no lo hagas. Si añadimos que mi tío segundo, un chico joven que había tenido problemas de drogas, pareció desintoxicarse, empezar su propia vida en Suecia, niño pequeño incluido, y un buen día en que debía de andar depre, se metió un chute que le costó la vida, pues tenemos que empíricamente nunca he sido muy amigo del mundillo que nos ocupa.

Luego llegaron los 16 años y la etapa, que se extendería hasta los 21, en que si no tomabas drogas ilegales, entiéndase desde porros hasta tripis, eras poco menos que un inadaptado, un gilipollas, un cobarde, o simplemente no estabas "en la onda"... ¿Quién no ha dado una calada a un peta por gregarismo, cuando sus amigotes lo pasaban de uno a otro? ¿Quién no ha tomado una pastilla para no ser menos? Pues yo no, queridos lectores, y ¿sabéis qué? Que conforme fui creciendo me di cuenta de que, todo lo contrario, era más que menos, no sé si me explico: soy una persona que, creo poder decir, siempre he hecho lo que he considerado, equivocado o no, faltaría más, pero nunca inspirado por otro individuo que, muy probablemente, fuera más estúpido. Esto puede extenderse a meterse con el marginado de la clase, por ejemplo, y muchas otras cosas.

Lo gracioso es que drogas las he tenido de todos los colores y formas a mi alrededor, he comprobado sus efectos, tanto positivos como negativos, escuchado historias, contrastado experiencias... He tenido papelinas de coca en el bolsillo, sostenido porros, trippis... me he visto rodeado de amigos puestos, o poniéndose, vaya. A estas alturas, a mi edad, no es algo que me asuste, que me dé miedo, que tema... es simplemente algo que rechazo y creo tener todo el derecho.

Hablemos, por fin, de la legalidad. Hasta ahora he tratado de explicar por qué mi educación y experiencias posteriores no me han hecho muy amigo de las drogas. Por qué, llegado a la edad de 28 años, me parece estúpido probarlas, no por falta de curiosidad, sino por coherencia misma. Pero hablemos, como he dicho, de legalidad... ¿Por qué he tomado alcohol, nicotina en todas sus variantes, aspirina, creatina, paracetamol, carnitina, taurina, cafeína...? ¿Por qué no he tomado marijauna, hachís, cocaína, incluyendo sus muchas y extravagantes recetas (crack, nevaditos...), polvo de ángel, LSD, speed o cristal, heroína, pastillas de éxtasis...? ¿Unas son mejores que otras? ¿Más sanas? ¿Menos perjudiciales? Esto es relativo, que podría discutirse, ya lo creo... pero no querido lector: sencillamente, unas son ilegales y otras no. Toma aire, cálmate y, sobre todo, abre tu mente...

¡Oooowww, aaaaawww, qué dices, uuuuuu! ¿Cómo que legalidad? ¡Qué excusa más endeble! ¡Hipocresía! Me dicen algunos... Veamos: vivimos en un mundo de reglas, para quien no se haya enterado; todos rompemos esas reglas alguna vez, incluso pueden haber reglas que sean absurdas o injustas, pero corresponde a cada persona decidir qué reglas sigue y cuales quebranta, ya que me parece obvio dentro de la ilegalidad hay muchísimos matices, desde el que comete un robo hasta el que hace pis en la esquina, por ejemplo.

¿Cómo afecta esta ilegalidad al mundo de las drogas en particular? Es decir, ¿qué hay más allá? ¿Cómo se materializa? Quiero decir, ¿en qué se traduce? Veamos:

1- Debo adquirir el producto en cuestión a través de medios de distribución cuestionables, o tomarlos de personas que han hecho lo propio. Esto es camellos clandestinos, a menudo explotados (como los negros de El Retiro), otras veces directamente delincuentes. No me convence, ¿es respetable? GRACIAS.

2- Por consiguiente, debo comprobar que en el proceso de compra, así como en el de consumo, no me vea la policía o las autoridades competentes, pues me arriesgo a que me sustraigan el producto o me pongan una multa. No me convence, ¿es respetable? GRACIAS.

3- Dado todo lo cual, muy probablemente esté adquiriendo una sustancia que no ha pasado unos niveles mínimos de calidad, a menudo adulterada, hinchada, cuando no directamente mezclada con poliester, plástico, hasta caucho y Dios sabe qué: todos han oído historias sobre los cartones de trippis con grumo, la coca mala o los viajes chungos. A mi personalmente jugar con fuego cerca de la dinamita, pues, emmm... NO me convence, ¿es respetable? GRACIAS.

4- Para más inri, por esa basura estoy pagando precios estratosféricos, muy superiores a los costes de producción y distribución de estos productos y en ningún caso regulados por el gobierno o las autoridades competentes. No me convence, ¿es respetable? GRACIAS.

¿Fumar un canuto en casa de un colega, encima de buena calidad, cultivado por él mismo, invitado, de buen rollo y bien tranquilo? Eso no va a cambiar la realidad en torno al asunto ni va a hacer que, cuando quiera volver a probarlo, tal vez me vea en la necesidad de morder el anzuelo, como cuando pasas de dar una calada a unos pitis a comprar tu primera cajetilla en el estanco... sólo que prefiero el estanco a un personajillo de "estrangis" en alguna esquina poco concurrida. ¿Probarlo una vez? ¿Para qué? De hecho, la tentación misma sería otro motivo más por el que, llegado a una edad adulta y madura, precisamente no me interesa meterme en algo que nunca me ha convencido y cuyas fases más "traumáticas" he superado, como creo haber explicado. Se entiende, se respeta, ¿no?

"Compras cerveza a los chinos y la bebes en la calle, eso es ilegal". Y así me podrían decir mil cosas, claro, porque yo no soy aséptico... pero es que esos chinos venden cerveza, coño, la puedo comprar en un bar, los narcos no se matan por la puñetera birra, incluso puedo tener sed sin más, vale cuatro duros, es de marca... volvemos a lo mismo. Bastante estúpido me siento ya pensando que tengo que disimular mi cerveza si pasa la policía por la calle, como para verme aun más escondiendo un producto que en sí mismo es clandestino de principio a fin y que muy probablemente he olvidado por qué empecé a tomar, tal vez porque fuera un poquito simplón/gregario, digo tal vez... Pero es que cerveza llevo tomando desde hace muchos años, con mi padre sin ir más lejos, como los pitillos, bien adulto, sabiendo lo que hacía y sin esconder nada desde el primer día y ¿qué pasa, que ahora se ponen estrictos y hay que pasar por el aro como un becerro? Eso no es ser legal, sino un simple mandao y ya lo creo que rechazo con vehemencia estas nuevas leyes cada vez más profilácticas: SI EDUCARAN MEJOR EN VEZ DE PROHIBIR, TAL VEZ LA GENTE ESTARÍA MÁS CONCIENCIADA, porque eso de la ilegalidad no parece afectar a muchas personas, vamos, ¡que si no, no estaría escribiendo!

Por otro lado, en mi última charla, me contraargumentaban por dos vías principales: por qué a lo mejor tomaría porros en Amsterdam, cosa que reconocí (nótese el "a lo mejor") y por qué utilizo juegos piratas para la consola. Empecemos con los famosos petas de Amsterdam... Si no los tomara, de hecho, sería porque estoy cansado de oir lo guay que es fumar un canuto en el coffee shop de turno, ¡qué pesadilla, parece que si no has tenido esa experiencia no has vivido! Pero vayamos a los famosos puntos:

1- Adquiero el costo en un establecimiento de dominio público, tranquilamente y sentado en una mesita, por qué no con un buen cafelito. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

2- Pido y fumo mi porrito tranquilamente, con la policía a tres metros tan pancho. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

3- Compro un producto de calidad, que ha superado los protocolos de sanidad impuestos por el ministerio correspondiente. Auténtico costo, como dicen los fumetas. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

4- Pago un precio razonable por un producto de libre distribución. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

¿Qué, soy el único que aprecia ciertas diferencias por la simple barrera que constituye la LEY? ¿O estoy alucinando? ...Ahora es el turno de los juegos piratas. Como he explicado antes, dentro de la ilegalidad hay un mundo de matices y corresponde a cada uno decidir qué barreras quiere traspasar. Volvamos a los puntos, donde esta vez encontraremos algo no tanto opuesto como sencillamente incomparable en cuanto radicalmente distinto:

1- Descargo mi juego directamente a través de internet, o lo compro por correos. No conozco a nadie que compre farlopa por correos, excepto los alijos que llegan a toneladas en barcos, ¡no te jode! ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

2- No me imagino a la policía llamando a mi casa porque uso juegos piratas, ni tengo que esconderme de nadie mientras los descargo o los disfruto. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

3- Adquiero reproducciones perfectas cuya calidad es exactamente igual a la del original, de hecho no me gustan los RIPs ni perderme nada. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

4- Para colmo, lo que pago precisamente es un precio de risa mucho más barato que el original, encima recibo mi juego antes de que salga en el mercado y puedo, en algunos casos, llegar a conseguir ediciones inéditas que nunca han llegado a ver la luz de forma oficial. ¿Se entiende la diferencia? GRACIAS.

Por favor, no comparemos la tarta de chocolate con el jamón serrano por el simple hecho de ser comida... Entonces, y me veo obligado a concluir a riesgo de no haberme explicado completamente, pero esperando no haber llegado a ser pesado... simplemente, ¿tan absurdo es condenar las drogas ilegales como tales? Es decir, ¿decidir no probarlas, ENTRE OTRAS COSAS, por estar al margen de la ley? ¿Esto no es respetable??? Pero tú tienes que comprender, casi aceptar, que otros hayan consumido y que tú, prácticamente, no lo hayas hecho de forma irracional, por prejuicios, tabúes... no señores, NO. Yo sólo pido el mismo respeto que ofrezco, ustedes sabrán lo que hacen con sus vidas, que yo creo saber lo que hago con la mía. GRACIAS.

Un saludo!

PD: por cierto, estoy completamente a favor de la legalización de las drogas blandas, pues sus efectos sobre la salud definitivamente no son peores que los del alcohol o el tabaco. Por desgracia, vivimos en tiempos puritanos donde la tendencia es todo lo contrario, a saber, prohibir o limitar aun más las pocas drogas que son legales.

11 comentarios:

Mike dijo...

La persona que recurría al tema de Amsterdam me ha dicho que se refería a la hipocresía de rechazar las drogas en cuanto nocivas para la salud y luego tomarlas en un coffee shop.

Aunque muy probablemente su venta y uso legal aumenta la calidad de las mismas, como ya he explicado, no puedo por menos que asentir ante esta alegación y lamento haber utilizado argumentos tan endebles.

De hecho, me alegro de haber escrito este post y haber ordenado mis ideas al respecto, ya que supongo todos caemos en ciertas contradicciones. Espero en definitiva no tener que verme explicando una vez más lo mismo y, sobre todo, que nadie se eche las manos a la cabeza por el tema de la legalidad, que me parece un argumento más y completamente válido, legítimo y respetable.

Un saludo!

NSTR dijo...

Lo de las leyes a mi es que me quema bastante ya que algunas son estúpidas. Yo soy más de la idea que planteabas: "Educar bien en vez de prohibir."

De lo que comentas tengo que apuntar que la hipocresía actual es increíble, ya que el tabaco esta demostrado que es tremendamente dañino para el organismo (puede que incluso más que alguna otra droga), pero como esta culturalmente aceptado, pues no se prohíbe.

Por lo demás apuntar que las ideas que planteas son muy interesantes.

Un saludo.

Mike dijo...

Evidentemente, hipocresías en torno a este tema las hay a porrillo, nunca mejor dicho, como el típico chico "sano" que no fuma y se pone borracho todos los fines de semana, el que no bebe y está todo el día emporrao, incluso el que sólo se pone algún tirito en ocasiones especiales, aparte de la gran masa de los que han probado de todo menos heroína, cuando hay drogas mucho más peligrosas: he visto de todo y en torno a este tema no hablo por hablar, como casi nunca.

La distinción entre drogas blandas y duras, fundamentada en que las primeras no alteran las capacidades psicológicas del individuo, no convence a la mayoría de expertos, pues muchas drogas blandas pueden ser altamente peligrosas y otras duras, como el alcohol, están socialmente reconocidas, como bien dices.

Es precisamente por eso por lo que, o bien no tomas absolutamente nada de nada, chico súper sano, o, puestos a probar algo, yo he decidido no traspasar las barreras de la legalidad, ahí está mi límite y ten por segura una cosa: para acabar metiéndose coca a mansalva o trippis como lacasitos, estoy convencido de que el 90% han empezado con los porritos en plan camello, rinconcito oscuro, qué guay soy, que no me pille la pasma... Forma todo parte del mismo mundillo, puede que injustamente, pero así es, yo no lo he inventado; de hecho, mira la posdata a mi post. Pero mientras la cosa no cambie -y va precisamente en dirección contraria-, definitivamente no me gusta entrar en ese juego: no lo he hecho nunca y menos lo voy a hacer ahora.

Quiero decir, en definitiva, que ignorar la influencia que tiene la ilegalidad misma sobre el mundo de las drogas, ESPECIALMENTE sobre ellas, es dar la espalda a una realidad, o mejor un problema, que probable y sencillamente no te afecta, ¡pues anda que no he oído y vivido yo historietas para todos los gustos! ¿Qué los cigarrillos son malos? Por supuesto, de hecho los he dejado, pero la diferencia entre que lleven el papelito de sus correspondientes aranceles sobre el tabaco y los adquieras en el estanco de turno, o que estés comprando vete a saber qué tras buscar al camello de la esquina oscura, para un servidor, es UN MUNDO. Qué se lo digan a los vecinos de Tirso de Molina o de la Plaza de Santa Ana, a ver si les parece lo mismo un estanco o una licorería que la chusma que tenían en las plazas, no te jode. Y ahora se ponen en las mismas con el tema del botellón... una pena, pero vamos, a mi no me vas a ver corriendo detrás de una lechera, tenlo por seguro. Y sobre probarlo en otras circunstancias... creo haberme explicado en el post.

En cualquier caso, simplemente, espero que esta mi postura sea respetada, que es de lo que se trataba. No me parece pedir nada del otro mundo, vamos, que no creo estar diciendo gilipolleces. Esto no es una cuestión de salud, sino de rectitud, madurez, independencia, sensibilidad y, si me apuras, hasta buen gusto.

Agradezco tu buena valoración sobre mis reflexiones al respecto y, como siempre, gracias por leer el blog, ¡se espera que en breve vuelva a cobrar más vidilla!

Un saludo!

Nash dijo...

Bueno, aprovecho lo que espero sea un duradero regreso para matizar varios puntos de tu argumentación.

Lo primero que quiero decir es que tanto en aquella discusión como ahora mismo tu postura fue absolutamente respetada; sin embargo fuiste tú el que te sentiste atacado por el mero hecho de disentir. Es razonable dados los problemas que has vivido en tu entorno con las drogas; se ve que es un tema que te toca la fibra sensible, pero repito que tu postura es respetada al 100%. Hoy como aquel día.

Toma drogas no "es guay". Ni deja de serlo. Vamos, que no es nada, es un hecho tan respetable como el contrario, lo que importa realmente son las motivaciones de cada cual al obrar en un sentido o en otro.

Por eso aquella noche discutíamos precisamente eso. Las motivaciones. Los argumentos.

Y tú hablas principalmente de uno, y con eso es con lo que no estoy en absoluto de acuerdo. Hablas de la legalidad. Y todo lo que dices es igual de aplicable a los otros temas, como la recurrente piratería. Porque no nos engañemos, el proceso de adquisición y disfrute de un juego pirata y el de un porro es igual de peligroso. De hecho te enfrentas a una ley infinitamente más severa al piratear que al fumarte un canuto.

Obviamente controlas más los canales de distribución de los juegos que los de las drogas, porque los conoces mejor. Y ambos "productos" pueden ser defectuosos, siendo más peligroso el de las drogas. Pero ese peligro adicional te lo puedes encontrar al consumir una copa de garrafón asqueroso en un bar (legal), o al correr demasiado con el coche (ilegal).

Pero yo lo único que quería decir ese día y hoy, es que ni el hecho de ser "droga" es determinante para ti (tabaco y alcohol) ni el hecho de ser ilegal te condiciona tanto como dices (juegos piratas, superar límites de velocidad, alcohol en las calles). Por tanto, la explicación que adivino de tus palabras (que también es absolutamente respetable), es la siguiente.

ilegal + barato = bueno
ilegal + caro = malo

Y esto es así porque no me sale ninguna otra conclusión en la que haya tal unanimidad de criterios, lo siento.

Nada más, espero que así escrito veas mejor que no se trataba de ningún ataque personal, incluso estoy en parte de acuerdo contigo. Lo que discutíamos eran las motivaciones, no tu postura que ¿es respetable? claro. DE NADA.

Mike dijo...

En primer lugar, gracias por no haber desgranado frases: hubiera sido un recurso tan fácil como deshonesto, ya que mi explicación es una cadena de elementos concatenados, por otro lado -y ya sabéis mi postura al respecto- como casi cualquier discurso lógico.

Veo que, por una cuestión de coherencia, mantienes que respetas mi postura, no así mis motivaciones, o en concreto aquella que atañe a la ley. Me parece una actitud un tanto intransigente, en cuanto respetas una postura (resultado) que de hecho es prácticamente idéntica a la tuya, pero no tanto unas motivaciones que, sencillamente, no compartes.

El hecho de no entender algo o entenderlo, pero no estar de acuerdo, no significa necesariamente que no deba ser respetado. En este caso volver a explicarme sería dar vueltas sobre lo mismo, pero no consigo entender por qué el aura de ilegalidad que rodea a determinadas drogas no podría ser motivo suficientemente respetable para su rechazo; de hecho, aunque tu conclusión de ilegal+barato=bueno e ilegal+caro=malo es extremadamente simplista, ya sería una diferencia incuestionable. La fórmula ilegal+inocuo=bueno e ilegal+nocivo=malo, por ejemplo, constituiría otra diferencia; y así muchos otros elementos con los que se podría conformar una adición de muy diversos sumandos: tú suprimes de la misma el "ilegal" y yo no por los motivos que ya he explicado, en el asunto este que nos ocupa.

En efecto, el tema de las drogas ilegales me toca una fibra sensible en cuanto he visto mucha gilipollez a mi alrededor que siempre he rechazado; cuestionar mis propias motivaciones al respecto, a estas alturas, sólo serviría para preguntarme a mi mismo si he sido un estúpido, si todas las veces que me he mantenido al pie del cañón han sido inútiles, incluso -reconozco- si me he perdido algo indispensable en esta vida... Y como estoy convencido de que NO es la respuesta, y así me lo ha ido demostrando la experiencia, no sólo mía, sino de quienes la han vivido de forma "activa", tal vez me ponga algo a la defensiva cuando se pone en duda la coherencia de mis motivaciones. Te pido por tanto perdón si me he mostrado algo ofuscado.

Sólo me queda decir que cada cual lea el post y saque sus propias conclusiones. Como de costumbre, un placer hablar con usted, Maese Nash :-)

Un saludo!

Anónimo dijo...

Qué casualidad, hacía tiempo que no me pasaba.

Yo lo que pienso es que tampoco es bueno abusar de ciertos «chutes» de ego, con los que a veces nos amenizas. Cinco jarras de cerveza, legales eso sí, y groserías mediante.

Salut.

Mike dijo...

Venga Giorgie, no te des por aludido XD

Lo único que puedo decir en mi defensa es que, cuando llegaste, ya me encontraba bastante a la defensiva y, como bien dices, un tanto ebrio. Hasta cierto punto comprensible cuando se cuestionan tus motivaciones para no consumir determinadas drogas, a estas alturas, ¡no te digo! ...En fin, el mundo al revés.

Lamento haber podido decir cosas que te hayan ofendido y, en tal caso, te pido disculpas.

Un saludo!

Anónimo dijo...

Nada hombre, Migui, ya nos conocemos lo bastante. Por eso me sorprendió verte así, no lo recuerdo nunca antes.

Es verdad, estabas a la defensiva, pero algo agresivo, como si el tema te tocara alguna fibra más sensible de lo debido. En fin, me reitero por mí mismo al menos, porque no estuve antes, pero esa fue la impresión que me dio, de que nadie te atacó en ese sentido. Otra cosa es que la ilegalidad o incomodidad de lo ilegal se expliquen mejor por la mañana en un blog, porque aquí, leyéndote, estoy perfectamente de acuerdo contigo.

Supongo que lo de creerse más que alguien por haber o no haber hecho esto o aquello (que es lo que creo que en el fondo te podía molestar de la adolescencia respecto a este tema) es algo que por suerte se pasa con la edad, cosa de la que empezamos a estar sobrados (¿cuanto sumamos entre ambos? Más de medio siglo, macho. brrrrr....).

Saludos, colegas.

Mike dijo...

Jeje, tienes toda la razón, y eso que yo odio los llamados "resortes traumáticos", es decir, los temas en que la peña se vuelve medio loca y flipa en colores. Para ser justo, no diré que nadie me había atacado antes de que llegaras, las cosas como son.

Supongo que el hecho de estar mi querida y casi recién estrenada novia -con las consecuentes inseguridades que esto conlleva- en el otro "bloque", me crispó más de lo debido, sumado a un día no demasiado bueno y unos cuantos cm3 de alcohol en sangre.

Efectivamente, el tema no me resulta hiriente ni tengo el más mínimo complejo, pero no te negaré que me toca los santos :-) Como he escrito en el post, me dió la sensación, tal vez equivocada, de que mis motivaciones eran poco menos que ridiculizadas. Luego Ana, por ejemplo, me lo explicó con calma y de ahí el primer comentario... y es que chorradas decimos todos. De todos modos, lo de "motivaciones respetables" no me lo he inventado, conste en acta.

Por lo demás, celebro y me alegro de que alguien tan apreciado como tú me entienda, porque honestamente creo que mi explicación es, como mínimo, pues eso, respetable, que a fin de cuentas es todo cuanto pedía.

Un saludo!

PD: juntos sumamos demadiado tío, no le des más vueltas XD

Unknown dijo...

Bueno, nunca había escrito aquí, pero dicen que nunca es tarde si la dicha es buena...
Supongo que en lineas generales estoy bastante de acuerdo con tu argumentación, aunque hay puntualizaciones que creo necesarias, y no se por donde empezar, así que tiro un dado y....
Bueno, vayamos al tema de la piratería. ¿Que es? basicamente disfrutar un producto legal conseguido a traves de meios que pueden estar al margen de o contra la legalidad.
Con los medios informaticos, nos hemos visto en una situación en la que la información, la cultura y especialmente el software son, o se han convertido en algo intangible, etereo, casi abstracto, y los "peligros" que conllevan ocasiones son cuestion de fe o supersticion(virus, manipulación...). En esta situación, los delitos de propiedad intelectual, o los movimientos por la difusión de la cultura se mueven de maneras que no son facilmente reconocibles como defensoras de un ideario coherente en si mismo.
Tenemos la posicion de los "difusores capitalistas" por llamarlos de alguna manera, su postura básica sería decir que toda esta información ha costado un esfuerzo de creación y distribución que tiene que ser remunerado para asegurar la futura producción de "productos de la información", y por tanto, cada vez que escuchas musica, lees algo o tu ordenador ejecuta alguna condenada secuencia de comandos tienes que pagar, o haber pagado en algun momento por el derecho de hacerlo, y nadie mas que los creadores y difusores autorizados tiene que recibir este dinero, por supuesto. La postura contraria sería la de que la cultura y la información es patrimonio de la humanidad y por lo tanto la información tiene que tener un acceso libre, sobre todo porque algo tan etereo como se ha vuelto la información en nuestros dias tiene un coste de transmision y copia tan insignificante como sucede hoy en día. Según esta postura, a la que me adhiero, mientras no entremos en el sistema y utilicemos esta información con animo de lucro, la idea es que la información tiene que estar disponible al margen de la capacidad adquisitiva de cada uno, por lo que seria lícito copiar o transmitir esta información, pero ojo, siempre sin pagar ni cobrar por ello, porque para eso ya estan los medios provistos por los de la 1º opinion. Ambas posturas tienen una razón de ser, y quizás se pudiera llegar a un termino medio en el que se encontrarían como sería unos precios reducidos para estudiantes, o precios acordes con el coste de producción y los beneficios del verdadero "creador", por lo que estaria en contra de tu comoda postura de comprar a tu su.
Lo que no veo bien, es pagar a un 3º por una copia, ya que este no colabora con la creacion ni realmente con la difusion de esta información.
Además, al contrario de lo que tu dices, si que hay peligros y adulteración en el pirateo, puedes encontrar, buscando algo en cuestion, virus, spyware, troyanos, griegos, o simplemente porno duro(añadid a la lista lo que sea que se me haya olvidado), lo que pasa es que la mayoría de estos peligros afectan a tu ordenador, no a ti directamente(aunque claro, si eres minimamente sensible, encontrarte un video porno gay en vez de lo que estabas buscando tambien puede afectarte en mayor o menor medida...nausea1 nausea2).
Bueno, en cuanto al argumento de la legalidad aplicado a este tema, coincido en que tu aplicacion es un tanto interesada, y le resta coherencia global a tu post, y aunque se te haga raro pensar en la poli en tu casa, a quien te suministra si que le podrían hacer una visita, a no ser, claro, que viva en polinesia o algun sitio donde eso del software es una cuestion de fe.
La legalidad en esta cuestion es una legalidad nueva, a la que le falta tiempo de evolución, aplicación y aceptación, probablemente(espero) vaya cambiando en un sentido o en otro en los próximos tiempos.
Bueno, he dejado este post a medias y ahora no tengo tiempo, ya contestare a las otras cuestiones.

Mike dijo...

Joder Bernie, ¡sí que te has estrenado, esperamos verte más por aquí! Aunque el uso de párrafos se agradecería :-)

El post no iba del software, la verdad, aunque me ha gustado eso de los gays y demás: Teorizen, al menos por mi parte, no pretende ser un altar de lo políticamente correcto y en este sentido tienes todo el derecho a denunciar las nauseas que te provocan determinados videos. En mi caso, la sorpresa fue con una especie de gang bang, orgía para los amigos, totalmente hétero, pero algo pasada de vueltas para un servidor.

En fin, supongo que nunca llueve a gusto de todos y estoy convencido de que, al igual que en el tema de la piratería, también en el de las drogas alguien te podrá argumentar su consumo en un momento dado, lo cual me parece fenomenal, esté o no de acuerdo.

No olvidemos que aquí de lo que se trataba era de defender, después de una charla algo crispada como habrás entendido por los comments, la simple respetabilidad de mis motivaciones. Después, como ya he dicho, cada cual con sus movidas...

Un saludo!